domingo, junio 26, 2016
Laucha
¿Qué pasa cuando dos malos se cruzan?
Con papeles sublimes de Sbaraglia y Lago, el clásico trhiller se va desenvolviendo y mostrándose como una obra que va a pasos agigantados rumbo al suspenso. Echarri, en el papel de ladrón, caracterizado, no brinda la seguridad necesaria pero ahí va la trama...
Un grupo de ladrones quiere entrar a un banco haciendo un túnel. Dicho túnel pasa bajo la casa de Joaquín (Sbaraglia), el cual un par de días antes recibe la visita de Clara Lago, la cual con una niña le alquinal la habitación que está sobre la terraza de su casa - él no puede llegar por que anda en silla de ruedas-. Luego, sorpresivamente, Sbaraglia se entera la intención de los ladrones y la complicidad de Lago con ellos.
Allí se van desencadenando distintos hechos. Con un poco de suspenso, con dramas, con golpes bajos y hasta con gore.
La fotografía es excelente, la historia también, aunque a veces se pierde en la redundancia.
El papel de Sbaraglia, en este cine pochoclero, es genial. En tanto, en la actriz, no se encuentran rasgos ni tonada española; lo que muestra profesionalidad.
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